Nunca hubo dudas de que el CNE es un instrumento de las dictaduras de Chávez y Maduro, pero igualmente de que, en coyunturas en que fueron derrotadas abrumadoramente por el electorado, retrocedió y reconoció las victorias opositoras.
Los ejemplos, no solo se refieren a elecciones locales y regionales, sino que, en fecha tan cercana como el 6D, el CNE aceptó oficialmente que el régimen había sido derrotado perdiendo la mayoría absoluta de la Asamblea Nacional y anunciaba una nueva etapa en la historia reciente del país, en que el gobierno pasaba a ser controlado por los poderes Legislativo y Ejecutivo.
Y sin duda que fue, fundamentalmente, por este precedente, por lo que, los partidos políticos democráticos y la sociedad civil esperaron con algo de confianza que el CNE cumpliera con el mandato constitucional e hiciera respetar los lapsos para que el Referendo Revocatorio se realizara este mismo año contra Maduro.
Pero nada de eso: los radicales antirrevocatorio, gente como Maduro, Cabello, Rodríguez y Aristóbulo Istúriz -para solo nombrar a unos pocos -sin duda le torcieron el brazo porque la voluntad no la tenía- a Tibisay Lucena y ahora es otra talibana madurista que dice que los lapsos no dan para este año y cree oxigenar al dictador y tenerlo a buen resguardo hasta el año que viene.
Una inconstitucional, miserable e inadmisible argucia que la sociedad civil y los partidos democráticos unidos deben rechazar contundente y aplastantemente, sin muestras de debilidad ni división. Convencidos, motivados y organizados para que el derecho que nos corresponde por mandato constitucional sea respetado y aplicado.
En otras palabras: que si el régimen de Maduro presiona al CNE, la sociedad civil y la oposición política democrática debemos presionar al régimen de Maduro, pues el Referendo Revocatorio no puede estar sujeto a los que van a ser revocados, sino a los que revocan, tal se desprende del mandato constitucional que pone la soberanía en manos del pueblo.
Es en la calle donde las auténticas democracias demuestran el poder que les confieren las mayorías, ya sea que estén el gobierno o en la oposición y si Maduro le ordena al CNE que le ponga trabas al Revocatorio, es porque están derrotados.