Carlos Becerra, Bloomberg.
enezuela, país que ya enfrenta un grave conflicto político y una crisis económica sin precedentes, podría entrar el próximo año en una peligrosa etapa de gran agitación ante la decisión del gobierno autoritario de Nicolás Maduro de cerrar las puertas a una salida electoral y el creciente costo social de la escasez, advirtió esta semana la ONG The International Crisis Group en un informe.
La organización, abocada a evitar conflictos alrededor del mundo, pronosticó que las Fuerzas Armadas venezolanas probablemente “ejercerán progresivamente más control del país” en la medida que continúe aumentando el descontento y la convulsión social, pero resaltó que es poco probable que se produzca un golpe militar “en el sentido clásico”.
La organización también señaló que la mejor manera de que ese proceso de negociaciones tenga éxito es que se realice bajo un gobierno interino, conformado por representantes de ambos polos del espectro político y bajo una supervisión mucho más estructurada que la entablada bajo los auspicios del Vaticano.
“Para restaurar el Estado de derecho y evitar mayor sufrimiento, un acuerdo con la oposición es esencial y solo puede lograrse con la ayuda internacional”, manifestó el informe.
Por otro lado, la agrupación resaltó la necesidad de buscar inmediatamente una solución a la crisis venezolanas y cuentiona la tesis que podrían tener algunos sectores de esperar hasta elecciones presidenciales del 2018.
“Con dos años de su mandato aún restantes […] el presidente Maduro y sus ministros parecen incapaces de evitar el colapso económico y una crisis humanitaria aún más profunda”, resaltó.
El costo social de esos dos años podrían terminar siendo muy alto en momentos en que el proceso de aguda contracción económica iniciado en el 2014 no da señales de detenerse y el país registra una tasa de inflación cercana al 1,000 por ciento.
El Nuevo Herald.