La exministra del despacho para la Salud (2010-13), la médico, coronela e imputada, Eugenía Sader Castellanos, cuenta las horas hacía lo que deber ser una privativa de la libertad si los tribunales “revolucionarios” le aplican una decisión justa en el escándalo que la involucra por un “peculado doloso” que le costó a la nación: 663 millones dólares. Todo comenzó cuando Sader, se “asoció para delinquir”, como una empresa de maletín, “Corporación Conmed”, la cual debía construir en tres años 6 hospitales en los estados: Apure, Barinas, Guárico, Miranda y el Distrito Capital. Desde luego que los hospitales no se construyeron o quedaron a medio construir, pero los anticipos fueron cancelados casi con la modalidad de “pronto pago”.