La estatua además de un escudo y la máscara antigases, símbolos de los jóvenes que a diario enfrentan la represión de las fuerzas de seguridad del estado, hay un cartel en el que se lee : «Maduro asesino», señalando al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, es el culpable por los casi 91 asesinatos ocurridos en los últimos tres meses durante las protestas que buscan rescatar la democracia en la nación.
La estatua de Simón Bolívar en Miami amaneció este miércoles, 5 de julio, envuelta en los símbolos de las protestas en Venezuela, cuando se cumplen 206 años de la Declaración de la Independencia del país caribeño que en ese entonces vivía bajo el yugo español.
Con motivo de celebrarse este miércoles el Día de la Independencia de Venezuela, Diario Las Américas dedicó su editorial para destacar la dura batalla que los demócratas libran contra un gobierno que perdió la legitimidad y pretende quedarse en el poder a la fuerza.
En el texto se recuerda la gesta histórica y se hace una analogía con lo que ocurre en Venezuela. «Los oficiales a caballo, los soldados a pie, muchos sin entrenamiento, abandonaron entonces sus hogares para librar a pulso batallas en las amplias sabanas del país, sin la certeza de volver a ver a sus familiares pero con la convicción de que la patria merecía el sacrificio».
Continúa señalando: «la lucha por la libertad y la independencia sigue vigente, y los libertadores de hoy luchan en las calles, sin armas, pero con una gran convicción para mostrar su descontento con lo que ocurre en la nación sudamericana: una crisis económica aguda, el mayor desabastecimiento de alimentos de la historia, la desaparición de medicinas, la inseguridad e impunidad, la falta de oportunidades y el resquebrajamiento de los principios democráticos, en el marco de la mayor represión protagonizada por las fuerzas de seguridad del estado, como la Guardia y la Policía Nacional Bolivariana, empeñadas en su violación de los derechos humanos, trabajando como el brazo armado que aniquila el pensamiento disidente con el uso de la fuerza y el vandalismo».
Vía Diario Las Américas