Notice: Trying to access array offset on value of type bool in /var/www/wp-content/plugins/social-media-feather/synved-social/synved-social.php on line 653
Notice: Trying to access array offset on value of type bool in /var/www/wp-content/plugins/social-media-feather/synved-social/synved-social.php on line 653
Notice: Trying to access array offset on value of type bool in /var/www/wp-content/plugins/social-media-feather/synved-social/synved-social.php on line 653
Notice: Trying to access array offset on value of type bool in /var/www/wp-content/plugins/social-media-feather/synved-social/synved-social.php on line 653
Puede que el precandidato republicano a la presidencia de Estados Unidos, Donald Trump, no sepa quién es el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, pero estoy seguro que de saberlo, querría estrechar las manos y abrazar al único jefe de Estado en el mundo que está aplicando sus recetas de manera completa y cabal.
En efecto, Trump, habla de sus planes para sacar a millones de mexicanos “a patadas” de un país que consideran “suyo”, y Maduro lo hace con los colombianos, Trump amenaza a los indocumentados con perseguirlos y expulsarlos al otro día de ganar la presidencia y, Maduro, no es lo que dice, lo hizo esta semana desalojando a miles de indocumentados de sus lugares de habitación y trabajo.
Es verdad que Maduro aun no promete, como Trump, construir un muro para que los 2500 kms de frontera colombo-venezolana no sean traspasados, pero por ahí va, que tanto Nicolás, como Donald (sus nombres de pila) se arrullan en eso de proponerse atrocidades imposibles.
¿En qué se apoyan uno y otro?, es una pregunta que no podría faltar en
estas líneas, y mucho menos una respuesta que tendría que insistir en la cobardía de los electorados de hoy día que, nadie sabe por qué sin razón de la historia, prefieren a los violentos antes que a los pacíficos, a los bárbaros antes que a los civilizados.
Acordémosnos que en Venezuela llevamos 16 años sufriendo tales energúmenos, ya sin respaldo popular por cierto, pero sacándole el juguito al que una vez tuvieron.
Esperamos que no sea el caso de Estados Unidos, una democracia mucho más madura que la venezolana, pero no por eso vacunada contra decisiones electorales que expulsen a los mexicanos de los estados unión y construya un muro para que no vuelvan a regresar.
Pueden ser horrores que pueden suceder en ocho años, los dos períodos que necesita Trump para cometer sus fechorías, así como Chávez y Maduro necesitaron 16 para hacerlas en Venezuela.
Construir tarda años, incluso siglos, pero destruir es cuestión de segundos.